I
Me la paso escribiendo
textos imaginarios
adentro de mi cabeza.
Pienso, en cada punto
en cada coma, en cada palabra.
Todos los días uno distinto.
Los convierto en munditos
con un color especifico para cada uno.
Cientos de esferas que
giran al rededor mío.
Finalmente cuando me dispongo
a formarlos, frente a una hoja
de color blanco, se torna
todo sin forma.
Estoy llena de manchas de
colores que yo invento.
Y no
salen
con el agua.
II
Me encantaría decirte todo
lo que quiero decirte.
Pero no puedo.
No puedo a vos, no puedo a ellos,
no puedo a nadie.
Me transformo en un secreto
que no puedo contar.
Ya ni sombras son las que me persiguen.
Me encantaría dejar de decirme
todo lo que quiero decirte.
Tiemblo.
Ya ni siquiera reconozco esta tristeza.
Lloro.
No existe el cable que llegue
a lo interno, no existe contacto
que electrifique a lo externo.